El domingo 30 de junio, la Juventud Masculina se reunió en Pentecostés en un agradable encuentro vespertino para alabar y promover la integración entre los grupos que ahora estarán unidos.
En contacto con la comunidad de Nuestra Señora del Rosario, nos quedamos a la misa de las 19h para celebrar la solemnidad de San Pedro y San Pablo, representantes del Evangelio de Cristo (Papa Benedicto XVI).
Que los santos celebrados hoy bendigan y cuiden a nuestros jóvenes, para que caminen por la senda de la luz y de la paz. Que nuestra fe sea siempre gas y fuente de alegría para seguir adelante.